La moda de los calzados de mujer como los tacones está presente en nuestra cultura durante siglos y pasó por numerosas evoluciones a lo largo del tiempo. Desde su uso inicial en la antigua Persia hasta su presencia en las pasarelas de moda contemporáneas, los tacones demostraron ser un elemento fundamental en el mundo de la moda y la cultura.

Pero, ¿es cierto que primero los usaron los hombres? A continuación, explicaremos la historia de los tacones y cómo evolucionaron a lo largo del tiempo para convertirse, hoy en día, en una parte esencial del armario de cualquier mujer que busque un estilo elegante y sofisticado. 

Orígenes

El primer ejemplo conocido de tacones altos procede del antiguo Irán, en el siglo X de nuestra era. En aquella época, Irán se llamaba Persia. Y fue el ejército persa el que tuvo el honor de llevar los primeros tacones altos. 

Los persas eran excelentes jinetes y la caballería formaba una parte importante del ejército persa. Los soldados a caballo atacaban con el arco a sus enemigos de pie en la silla de montar y como esto no era nada fácil, se necesitaba una prodigiosa cantidad de habilidad y un poco de ayuda de algún calzado apropiado.

Y nada más y nada menos que unos tacones altos. ¡Así es! Los persas habían descubierto ingeniosamente que un tacón más largo les ayudaba a mantener los pies en los estribos cuando se levantaban para disparar sus arcos. 

A pesar de haber transcurrido milenios, el mismo principio se sigue utilizando actualmente, por eso las botas vaqueras y las botas de montar tienen tacón de bloque. 

En Europa

Como el imperio persa mantenía relaciones comerciales bastante estrechas con los países e imperios europeos, es probable que la idea de los zapatos de tacón alto llegara a través de los canales comerciales. Y es que las rutas comerciales no solo eran métodos de intercambio de mercancías, sino también de un gran intercambio cultural. 

En cualquier caso, en el siglo XIV, las mujeres de Europa, y en particular de España y Venecia, llevaban unos zapatos altos con plataforma llamados chopines. Originalmente,  eran un tipo de zueco que se llevaba sobre el zapato normal para proteger al usuario de la suciedad de las calles medievales.

Sin embargo, con el tiempo se convirtieron en una moda, sobre todo en Venecia. Las cortesanas y las mujeres de la nobleza las llevaban cada vez más altas, lo que les daba un aspecto más bien tambaleante.

Y con el tiempo, el gobierno veneciano aprobó una ley que limitaba la altura de los chopines a 5 cm, pero la mayoría hizo caso omiso. Esta fue, quizás, la primera ley relativa a los tacones altos.

La cumbre de la moda

En el siglo XVII, los zapatos de tacón habían adoptado una forma más parecida a los tacones actuales. Los dedos estaban más cerca del suelo, pero el tacón se elevaba mediante un pequeño bloque. Aunque, al principio eran los hombres quienes calzaban estos nuevos y lujosos zapatos.

Además, en siglo XVII eran un símbolo de estatus, solo los hombres que tenían mucho dinero podían usarlos, fue así como durante este periodo de la historia este modelo de zapato, se convirtió en el calzado de reyes, príncipes y nobles.

Por ejemplo, al rey Luis XIV de Francia le gustaban especialmente esos zapatos y empezó a considerarlos un símbolo de poder. Cuanto más alto era el tacón, más poderoso era su portador. 

Y como le gustaban tanto, mandó hacerse muchos pares para él de diversos materiales, como el satén y el terciopelo. Y los hizo teñir de rojo o azul real para acentuar aún más su lujo. 

Asimismo, al igual que en la actualidad, las celebridades marcaban tendencia. Por tanto, los tacones se hicieron cada vez más comunes entre la plebe, tanto así que intentaba imitar el estilo del rey y su corte. En consecuencia, se impuso una regla sobre la altura del tacón en función de las clases sociales. 

La revolución

A medida que avanzaba el siglo XVIII, las cosas empezaron a cambiar. En primer lugar, como las mujeres empezaron a adoptar este estilo, tuvo que haber alguna distinción entre los tacones para hombres y los de las mujeres. Por ejemplo, los zapatos de tacón femeninos tenían tacones más finos, lo que los hacía más difíciles e incómodos de llevar. 

Sin embargo, con el Renacimiento y la Ilustración, los hombres dejaron de llevar tacones. Además, la Ilustración convenció a los hombres de que eran seres racionales frente a la irracionalidad de las mujeres. Por tanto, los tacones quedaron relegados al ámbito femenino.

Este cambio de género no fue el mayor que afectó a la historia de los tacones durante esta época, sino que el cambio más importante se produjo a finales del siglo XVIII alrededor del año 1780, cuando la Revolución Francesa causó una agitación increíble. 

Los tacones altos, aunque los llevaban tanto nobles como plebeyas, se habían asociado durante mucho tiempo con el poder, el orgullo y la realeza. Y cuando empezó la revolución, ya nadie quería relacionarse con la nobleza por miedo a perder la cabeza.

Del mismo modo, en otros países como Gran Bretaña y Estados Unidos, los tacones altos y otros productos cosméticos se consideraban un lujo. Y las mujeres que llevaban tacones recibían el mismo castigo que las brujas: ¡quemadas en la hoguera!

Renacimiento

En la segunda mitad del siglo XIX se produjo un renacimiento de los tacones altos. Al principio, reaparecieron con una altura de unos 5 cm. Pero, a medida que avanzaba el siglo se patentaron más diseños de tacones, que se convirtieron en un elemento básico de la moda de lujo como el tacón Pinet y el tacón Cromwell, que se vendieron muy bien.

Los fabricantes de tacones, como todo el mundo, estaban sujetos al racionamiento. Materiales como la seda, el caucho y el cuero ya no estaban disponibles, por lo que se utilizaban productos más baratos como el corcho o la madera para las suelas.

A pesar de las dificultades a las que se enfrentaban los fabricantes de tacones en las cadenas de producción, no se frenó la demanda de tacones altos. En esta época, las mujeres llevaban esos zapatos para acentuar su cuerpo, luciendo una piernas más largas y unos músculos más tonificados

Además, gracias a la llegada y proliferación del cine y la fotografía difundieron por todo el mundo imágenes de mujeres sexys con tacones altos. Figuras como Marilyn Monroe y Audrey Hepburn ayudaron a convencer a las mujeres de que los zapatos altos, y en especial el de tacón de aguja, eran el camino más rápido hacia el corazón de un hombre.

La postura feminista

La popularidad de los tacones de aguja y otros zapatos finos de tacón alto, a principios y mediados del siglo XIX, es en gran parte responsable de que el zapato siga siendo tan popular ahora. Sin embargo, en las tres últimas décadas del siglo XX se produjo un cambio en la percepción de los tacones.

En los años 70, el feminismo de la segunda ola ayudó a liberar a la mujer y a crear una nueva percepción de su papel en la sociedad. Y la idea de llevar tacones para complacer a los hombres se volvió increíblemente impopular y estos sufrieron un bajón de popularidad durante esta fase de su historia.

Pero, revivieron en una nueva forma en la década de 1980, cuando celebridades como Madonna, Freddie Mercury y David Bowie empezaron a llevar zapatos de tacón y botas como una declaración de moda, en lugar de un complemento.

Actualidad

Hoy por hoy, la naturaleza, el razonamiento y las implicaciones culturales de los zapatos de tacón son distintos. Por ejemplo, hay quienes llevan tacones con fines estéticos o cosméticos y otras para hacer una declaración de moda.

Actualmente, disponemos de una enorme selección de estilos y tipos de zapatos. El número de zapatos de tacón disponibles contribuye a su popularidad, por lo que hay un zapato de tacón para cada ocasión.

Como ves, los zapatos de taco han resistido guerras, leyes y revoluciones culturales, sociales y políticas. Y aunque para algunas puede resultar incómodo y sea imposible caminar con ellos en algunas circunstancias, no se puede negar, que son increíblemente duraderos.

Hasta aquí, hemos visto el origen de los tacones. Y desde su invención, estos han sido utilizados por hombres y mujeres para diversos fines, como mejorar su estatura y mostrar estatus social. Sin embargo, los tacones siguen siendo una elección popular de calzado para muchas personas en todo el mundo. ¿Qué esperas para tener el tuyo?

AZALEIA PERÚ es la empresa importadora de calzados femeninos más grande en América Latina. Si tienes dudas sobre tu compra online, ¡ponte en contacto con nosotros y te responderemos a la brevedad!